1. Lo de mover, es fácil. Hasta dos losetas excepto si entramos en una con fuego, que acabaremos nuestro movimiento ahí (aunque sí podemos marcharnos de una loseta con fuego si empezamos el turno en ella). Y otra casilla de montaña rocosa que requiere de 2 movimientos tanto para entrar como para salir de ella.
2. Lo chulo del juego: combatir el fuego. Porque si fuera quedarnos plantados viendo cómo arde todo, como que no molaría nada.
Cada loseta tiene un grupo de iconos que representan distintas caras de los 6 dados que tenemos.
Ahora diréis: Bah, lo típico, hay que sacar esos iconos para apagar el fuego.
Pues no.
Lanzamos los dados. ¿Coincide al menos un dado con algún icono de la loseta?. Sí. Pues los apartamos. Ahora nos toca decidir: ¿seguimos tirando para conseguir más dados coincidentes con los iconos?. Pues vale, pero si en la siguiente tirada NO sacamos ningún dado coincidente y que no esté ya «usado» (de tiradas anteriores), PERDEMOS ese turno.
O sea, que tendremos que decidir en qué momento parar de lanzar dados o seguir arriesgando. ¿La pega? Que con menos de 3 dados coincidentes NO HACEMOS NADA.
Si conseguimos 3 dados: colocamos una barrera en un lateral de la casilla en la que estemos (evita la futura propagación del fuego).
Con 4 dados: quitamos un marcador de fuego de la loseta en la que estemos
Con 5 dados: apagamos 2 fuegos y podemos escoger entre tomar de la reserva una barrera y colocarla o un token con habilidades especiales.
Con 6 dados: Apagamos 3 fuegos Y colocamos una barrera Y cogemos un token. ¡Menudo premio!. Solo al alcance de los más valientes (aunque algunas reglas permiten tener apoyos y poder relanzar un dado si nos sale mal una tirada. Aún así, conseguir 6 es muy difícil).
3. Por último, cogemos una carta de un mazo de eventos barajados de una forma determinada al inicio de la partida y añadiremos focos de fuego a unas casillas, propagaremos el fuego en la dirección del viento, haremos girar el token de dirección del viento, se provocarán explosiones en zonas concretas del mapa, etc.
Parece imposible de ganar, ¿verdad?. Por suerte dentro del tablero, formado por losetas hexagonales colocadas al azar (como para la preparación del Catan) tendremos un lago (que dará apoyo a todas las losetas adyacentes y un aeródromo donde podremos activar el avión (quita 1 ficha de fuego en 3 casillas adyacntes), el helicóptero (apaga 3 fuegos de una única casilla) o el vehículo todoterreno que nos permite colocar 3 barreras seguidas para evitar la propagación del fuego cuando nos salga en las cartas de evento.