A partir de 8 años
De 2 a 4 jugadores
15 min. aproximadamente
Game of Trains lo tengo desde hace tiempo (al igual que muchos otros) pero estaba guardado porque a mí «no me decía mucho». Es sencillo, no me aporta nada para los tipos de juegos a los que estoy acostumbrado a jugar, pero no llegué a deshacerme de él porque le veía otro uso. No solo el lúdico, sino el didáctico.
¿Por qué lo jugamos?. Básicamente porque aparte de que al pingüino le chiflan los trenes y le encanta ir reconociendo en algunos vagones muchos iconos de mi infancia, que encima está heredando con mucho gusto, le está ayudando a reconocer números de 1 y 2 dígitos y lo más importante, a relacionar sus valores para reconocer la secuencia de números de mayor a menor y viceversa, que es de lo que trata el juego.
De las 88 cartas del juego, 84 son vagones y 4 son locomotoras.
Cogemos una locomotora y 7 cartas al azar. Después de encontrar el Ecto-1, el Delorean y demás, ordenamos nuestros vagones de mayor a menor.
Esto nos llevará un rato pues el niño tendrá que reconocer las cifras e ir jugando con ellas y pensando en sus valores para ir ordenándolas correctamente. Siempre le ayudaremos, depende de su nivel, para que no se canse y quiera dejar el juego antes incluso de empezar.
El objetivo del juego es conseguir ser el primero en dejar los vagones ordenados de menor a mayor.Nos fijamos que las cartas tienen un número y un símbolo. En cada turno tendremos que hacer una de estas 2 acciones:1. Coger la carta superior del mazo de robo o
2. Coger una carta del centro de la mesa y realizar su acción.1. Al coger una carta de vagón, tendremos que reemplazarla obligatoriamente por uno de los vagones de nuestro tren. Los niños tendrán que pensar cuál les interesa más de cara a dejarlos bien ordenados o por si se quieren deshacer de una carta para usar más tarde su acción.
La carta que quitemos de nuestro tren la dejamos en el centro de la mesa boca arriba y se podrá coger en turnos posteriores (también el resto de jugadores) pero solamente para realizar la acción que muestra, nunca para colocarla en nuestro tren.
2. Si en lugar de reemplazar un vagón vemos en el centro de la mesa alguna carta con una acción interesante, la cogemos, realizamos dicha acción y descartamos dicha carta.
Las acciones pueden ser:
– Mover un vagón 2 espacios a la izquierda o a la derecha.
– Intercambiar dos cartas adyacentes
– Intercambiar dos cartas pero manteniendo una en medio sin mover.
– Retirar la carta del extremo derecho, izquierdo o la carta central.
Gracias a estas acciones iremos colocando en su correcto orden los vagones y el primero que lo consiga ganará la partida.
Finalmente diré que aunque el juego es un filler y se suelen jugar varias partidas hasta que los jugadores cansen y pasen a otra cosa, nosotros jugamos una nada más. El hecho de tener que estar mirando, ordenando y cambiando las cartas pensando en futuros turnos hace que se nos extienda bastante y jugar dos o tres partidas seguidas nos frustraría y eso es malo en cuanto a que el próximo día que hablemos de sacarlo para jugar, no nos apetecerá.